Boca necesitaba que el año termine. En una temporada en la que no pudo cumplir ninguno de sus objetivos y jugó por varios momentos muy mal, lo único que le quedaba era despedirse de su gente de la mejor manera. En el clásico ante Independiente la Bombonera se hizo escuchar y pidió por la Libertadores. Dependen de que no gane el campeonato Huracán.
En la tribuna estuvo Darío Benedetto, hoy jugando en el fútbol mexicano. El Rojo también quería culminar el año lo mejor posible, en el que tampoco obtuvo los resultados esperados. Tuvo una chance clara de ponerse en ventaja pero Marcos Rojo sacó la pelota en la línea. Boca tuvo algunas oportunidades pero le faltó precisión.
El partido pudo ser un fiel reflejo de este 2024 para ambos. Ahora Boca va a esperar que Huracán no se consagre mañana para poder ingresar por la ventana a la Libertadores. Si no, se tendrá que conformar con la Sudamericana.