Tras la dura derrota de River ante Atlético Mineiro, Marcelo Gallardo no se guardó nada y declaró sin pelos en la lengua. El entrenador reconoció que su equipo falló en todas las líneas y dejó en claro que deberán jugar un partido perfecto en la vuelta para intentar revertir la serie. “Fuimos un equipo frágil en todas las líneas”, afirmó el DT, molestó.
Además, admitió que River no fue el conjunto duro que esperaban ser y que el rival aprovechó cada desacople, y agregó: “Queríamos jugar mano a mano por los costados y que nos sobre un jugador en la zona central pero ellos con pelotazos largos nos complicaron”. La forma de juego que implemento el equipo local fue un factor determinante en el desarrollo del juego ya que River no estaba preparado para esto.
Gallardo también destacó la importancia del apoyo incondicional de los hinchas: “La gente acompañó de una manera increíble. Tengo la sensación de que no pudimos responderle”. El respaldo del público será clave en la vuelta, donde el equipo necesita de su energía para revertir la situación. “Vamos a tener que manejar la ansiedad en la vuelta, el primer gol será necesario para ponernos en partido. Eso es fundamental”, enfatizó.
También, hizo hincapié en la necesidad de una reflexión profunda: “Después de la bronca de esta noche, debemos analizar qué salió mal para mejorar en la vuelta”. Reiteró que el partido de hoy fue una clara demostración de que, si no hacen las cosas de manera perfecta, les va a costar. “Debemos revertir desde lo mental y desde la jerarquía futbolística”.
Por último, quien supo ser campeón en 2 ocasiones de la Copa Libertadores con el Millonario y vivió paradas duras, mantiene la esperanza de que el respaldo de su gente en el Monumental sea clave para dar vuelta la serie y alcanzar la final de la Copa Libertadores. “Vamos a jugar en nuestro estadio con nuestra gente, y eso va a ser un plus. El equipo tendrá que dar todo para que la historia sea diferente”. La cuenta regresiva para el partido de vuelta ya comenzó, y la misión será más que difícil, pero el DT confía en sus jugadores.