Racing está pasando un buen momento y quería estirarlo recibiendo a Independiente Rivadavia en el Cilindro. El equipo de Gustavo Costas tenía la intención de acomodarse en el campeonato. Pero a los 7 minutos Sebastián Villa la robó sobre la línea derecha y encaró para el área. Por adentro venía Victorio Ramis que la empujó al arco.

La Academia rápidamente reaccionó y a los 16 Juanfer jugó corto un tiro de esquina para Gastón Martirena que metió un gran centro que lo encontró a Maravilla Martínez por el segundo palo. El delantero saltó más alto que todos y de cabeza empató el partido. Se fueron al descanso empatados.

Ya en el complemento Racing dominaba pero no convertía. Y sufrió algunos embates de la Lepra mendocina. Villa convirtió un gol que fue anulado por el VAR y le dio un alivio a todos en Avellaneda. El partido se iba y a los locales no les servía el punto.

A los 41 un tiro libre cerca del arco ilusionó a todos. Juanfer Quintero estaba en la cancha y se hizo cargo de la pelota. El colombiano acarició la pelota y la puso contra el palo del arquero Ezequiel Centurión, que voló, tocó la pelota pero no pudo desviarla. Golazo y delirio total en el Cilindro.

Con esta victoria Racing, que espera por Cruzeiro en la final de la Copa Sudamericana el 23 en Asunción, se puso a cinco de la cima de la tabla y se metió de lleno en la pelea por el campeonato. A Independiente se le escapó un punto importante y deberá recibir a River en Mendoza la próxima fecha.