San Lorenzo y Estudiantes empataron 1-1 y, la verdad, el partido dejó más preguntas que respuestas para ambos. El Ciclón no levanta cabeza y sigue con sus altibajos, mientras que el Pincha, que continúa invicto, no termina de convencer.

El partido arrancó con todo, y San Lorenzo se puso en ventaja con un gol de Leguizamón de cabeza. Pero no duró mucho la alegría, porque la expulsión de Irala por un codazo y el gol de Tobio Burgos, tras un error de la defensa, dejaron al equipo con gusto a poco. Russo sigue buscando una fórmula, pero el equipo no termina de encontrarla y sigue dando tumbos.

Estudiantes, por su parte, no hizo mucho para ganar, pero tampoco perdió por méritos ajenos. El empate les sirve, pero su juego no entusiasma. Los de Dominguez parecen seguir en piloto automático, invictos, pero irregulares.

Por otro lado, lo de Muniain es una pena. No encontró nunca el espacio para mostrarse y cuando lo hizo, Estudiantes le bajó la espuma. Así y todo, sin él, el Ciclón no sabe cómo atacar. El equipo se quedó en la nada, jugando a los pelotazos y con jugadas a balón parado que no dieron resultado.

En resumen, empate que deja la sensación de que a ninguno de los dos equipos les vino bien. San Lorenzo sigue buscando identidad, y Estudiantes, aunque sigue invicto, no muestra el fútbol que lo ponga como candidato. Habrá que ver qué pasa en las próximas fechas, pero hoy, la cosa estuvo floja.