La lista comenzó con la obra del artista Alejandro Marmo que desde Boca le regalaron al Dibu Martínez el martes cuando la Selección jugó en La Bombonera. El regalo fue por haber sido elegido por segundo año consecutivo como mejor arquero del mundo, pero la obra generó alguna polémica en las redes sociales por el tamaño y el diseño.
En 2016 Lanús le ganó a River la final de la Supercopa Argentina y Lautaro Acosta recibió un obsequio increíble: una parrilla. Acosta fue elegido como el jugador del partido pero para colmo el delantero dijo que no sabía hacer asados.
Al año siguiente River vuelve a disputar la Supercopa Argentina, en este caso ante su clásico rival, Boca. El partido lo ganaron los Millonarios y el mismo sponsor que le entregó la parrilla a Acosta le entregó en esta oportunidad una corona de metal a Franco Armani, que consiguió su primer título con la camiseta de River.
Uno muy recordado por todos fue en la despedida de Martín Palermo de Boca. El 12 de junio de 2011 el Titán jugó su último partido con la camiseta del Xeneize y desde el club le regalaron un objeto muy especial. Y grande: el arco de La Bombonera, en el que se cansó de hacer goles. Ahora el arco está en un complejo deportivo en La Plata que maneja el hermano de Palermo.
El siguiente ocurrió este año, luego del partido entre Boca y Talleres por Copa Argentina en el que el Xeneize pasó por penales. Pol Fernández fue elegido como el jugador del partido y le regalaron un taladro de la marca que es sponsor del torneo.
Fuera del fútbol argentino un hecho insólito sucedió en la Superliga de Zambia. Al mejor jugador del partido del equipo Power Dynamos le entregaron ¡cinco maples de huevos! En la MLS a Carles Gil, futbolista de New England Revolution le regalaron una bolsa de pochoclos. En Ghana al mejor jugador del Legon Cities le regalaron un ventilador de pie y un celular.
El último caso que seleccionó el Tano fue en la final de la Copa Intercontinental de 2003 donde Boca le ganó al Milan de Ancelotti y Matías Donnet fue elegido como el mejor futbolista de la final. ¿El regalo? Un Toyota Avensis.